Aquellos que nos sigan de manera habitual conocerán la especial debilidad que sentimos en el Planetahuevo por gadgets como la Raspberry Pi y demás fauna tecnológica relacionada con estas pequeñas placas de desarrollo y que ha ido creciendo como la espuma en estos últimos meses. Ya dedicamos un artículo a todas las alternativas que están surgiendo para destronar a la Raspberry Pi, donde mencionábamos a la placa de desarrollo Cubieboard, que vamos a analizar a fondo a continuación.
¿Comenzamos?
El punto de partida de Cubieboard podríamos fijarlo en Indiegogo, una plataforma muy similar a Kickstarter, y en la que proyectos creados por desarrolladores y creativos independientes van en busca de financiación colectiva para poder llevar a cabo su proyecto, premiando a los colaboradores que aporten dinero a sus ideas con packs exclusivos que tienen relación con el proyecto que intentan financiar.
Y prácticamente aquí es donde comenzó todo, cuando unos desarrolladores de origen Chino presentaron al mundo un pequeño proyecto llamado Cubieboard, con un vídeo, una lista de especificaciones y la intención de conseguir 50.000€ (consiguieron 95.000).
Unboxing Cubieboard
Cuando realizamos un pedido de Cubieboard, la primera toma de contacto que tendremos con este gadget será el momento de sacarlo de la caja cuando lo recibamos, y en el interior de la cual encontraremos:
- Placa de desarrollo Cubieboard
- Cable SATA
- Cable de alimentación vía USB
También venden unos paquetes más caros que incluyen la caja y algún cable extra. Os dejamos con un vídeo que ilustra el proceso para los más curiosos:
Especificaciones técnicas de Cubieboard
Según la información que encontramos en la página de los desarrolladores de Cubieboard, cada una de estas placas de desarrollo incorpora:
- Procesador 1G ARM cortex-A8, NEON, VFPv3, 256KB L2 cache
- Gráfica Mali400, OpenGL ES GPU
- 1GB DDR3 @480MHz
- Salida HDMI 1080p
- 10/100M Ethernet
- Memoria interna Nand Flash de 4GB
- Conexiones: 2 USB , 1 micro SD slot, 1 SATA, 1 infrarrojos
- Soporta sistemas operativos basados en Android, Ubuntu y otras distribuciones de GNU/ Linux.
A primera vista, si nos fijamos en las especificaciones técnicas de esta máquina podríamos afirmar que esta se encuentra más que bien equipada y sin nada que envidiar a la estrella Raspberry Pi, de hecho la supera en algunos puntos.
Pero en una batalla en la que se tengan en cuenta precio/capacidades/hardware, ¿cual de las dos sería proclamada como ganadora?
Cubieboard vs Raspberry Pi
Todos sabemos que las comparaciones son odiosas…pero en este caso no nos queda otra opción que comparar estas dos placas de desarrollo para determinar cual es la mejor de ambas o cual nos aporta mejores especificaciones y posibilidades a menor precio.
Cubieboard tiene un precio aproximado de 55 euros (envío incluido), frente a Raspberry Pi que contando el precio del envío del paquete llega aproximadamente a unos 44 euros.
Pese a que la diferencia de precio de 12 euros aproximadamente no sea muy escandalosa, ¿como determinar cual de las dos puede ser una opción de compra más interesante?
En primer lugar, tenemos que tener en cuenta que es lo que esperamos de nuestra placa de desarrollo, y que es lo que pretendemos hacer con ella.
Raspberry Pi nació en un primer momento como una alternativa barata y asequible enfocada a la educación con la que ayudar a los más pequeños a familiarizarse en proyectos de programación y derivados, por lo que sus capacidades técnicas se encuentran limitadas para ello, por que al fin y al cabo, para el fin principal por el que se creo no necesitaba más.
Sin embargo, y gracias al éxito de Raspberry, han ido llegando un sinfín de proyectos que han conseguido adaptar el hardware de este gadget para crear un variado abanico de utilidades, como este ordenador portátil creado a partir de una placa Raspberry.
Por otra parte encontramos a Cubieboard, que en todo lo referente al hardware consigue ganar a Raspberry, sobretodo en lo referente al procesador, ya que este cuenta con un procesador A8 y un GPU Mali 400 ( este es igual al que incorpora Raspberry Pi) metidos ambos en un chip A10 que funciona a 1 GHz frente a los 700 MHz de Raspberry, y una memoria RAM de 1GB que practicamente dobla a la que viene de serie en Raspberry, por no mencionar el interesante añadido de ese cable SATA nativo con el que podremos crear nuestro propio centro multimedia tan solo conectado un disco duro externo.
De manera que, puestos a adquirir una de estas dos placas de desarrollo, personalmente optaría por adquirir un ejemplar de Cubieboard, dado que pese a la pequeña diferencia de precio esta tiene más que ofrecer tanto en hardware como en software, ya que al contar con el sistema Android como preinstalado, si queremos comprobar su correcto funcionamiento tan solo tendremos que conectarlo a una pantalla y comenzar a disfrutar de nuestro Cubieboard.
Sin embargo, como mencionamos anteriormente antes de proceder a la compra de alguno de los dos modelos se me hace indispensable que pensemos detenidamente y con mente fría el tipo de uso al que vamos a destinar a nuestra placa de desarrollo. Al final, Raspberry parte con una ventaja fundamental, la gente. Hay mucha más información, mucha más documentación, parches, software, etc pensados para la Raspberry que para la «nueva» Cubieboard, por tanto hay que tener un poco de paciencia para ver si, como parece, Cubieboard puede llegar al nivel de Raspberry Pi.
[box type=»info»]Os pongo un ejemplo: para instalar el XBMC en la Raspberry Pi hay muchos tutoriales, pero en la Cubieboard todavía no es posible directamente (aunque se puede instalar usando el Android).[/box]
¿Que sistemas operativos son compatibles con Cubieboard?
Como os mencionábamos unos párrafos más arriba, una de las principales ventajas de Cubieboard es su compatibilidad con Android y algunas distribuciones de Ubuntu y es que gracias a su procesador más potente y mayor capacidad de almacenamiento dentro de su placa podemos acceder a sistemas operativos más completos y funcionales.
Desde un principio recibiremos nuestro Cubieboard con Android preinstalado, por lo que para esas primeras tomas de contacto en las que nos familiarizamos con el gadget puede venir muy bien, ya que podremos comprobar rápidamente si todo funciona de la manera en que debería, o estudiar varias opciones para utilizar nuestra placa sin complicaciones de ir buscando algún SO compatible.
De manera que, si estábamos tentados en la compra de una Raspberry Pi, no podemos dejar de lado el proyecto de Cubieboard el cual puede resultar más o menos interesante, según los proyectos que estemos pensando en desarrollar.
Y pese a que la competencia entre las dos placas de desarrollo sea férrea, sin duda alguna no podemos proclamar a ninguna como mejor que otra, ya que ambas son una fuente de ideas y creatividad con las que los usuarios pueden dar forma a cualquiera de sus ideas y enriquecerse. Al final, depende de para qué la necesites, la Raspberry Pi puede ser suficiente o quizás necesites la potencia extra que te da Cubieboard.
Nosotros no podemos elegir una todavía, ¿tu con cual te quedas?
temmmp dice
¿ «analizar a fondo a lo largo de este artículo y de la cual no dejaremos ni un solo milímetro por reseñar.» ? Básicamente habéis cortado y pegado la info de su web… un poco de seriedad.
darkpollo dice
Vamos a ver. Un poco de respeto. No suelo contestar a los trolls, pero en este caso me fastidia que se ataque a mis colaboradores sin razón ninguna.
Dime de dónde se ha copiado antes de soltar semejante barbaridad. Que un escritor cometa un error al tratar de juntar una revisión tan larga como esta es normal, precisamente porque el contenido que publicamos en el blog es original y no somos profesionales de esto, sino aficionados con un blog. Ni cobramos nada por ello así que no podemos pagarnos una persona que nos revise los textos.
Así que te agradezco que nos avises del error, pero la próxima vez podías hacerlo con algo más de educación y respeto.
Julio Cesar dice
Hacenenvios a Perú?
darkpollo dice
Pues no tengo ni idea. Nosotros no vendemos aquí. Todavía… ;)