Ayer era uno de esos domingos que uno decide buscar nuevas formas de ocio. No porque no tenga suficientes, la verdad, pero es mi naturaleza seguir explorando y buscando nuevos retos, como puede verse si se mira un poco el contenido de este blog (un culo inquieto que dicen algunos). Pues bien, la decisión, tras consultar con un par de amigos fue introducirme en el fantástico mundo del HearthStone y voy a ir contando mi experiencia inaugurando está nueva sección en el blog específicamente dedicada al Gaming.
HearthStone – El juego
Para los que no estén muy metidos en este mundo de los juegos online, os diré que Hearthstone es un juego de cartas coleccionables tipo Magic, pero que se juega online y que es completamente gratuito. Obviamente las reglas no son como las del Magic pero el sistema es similar: enfrentamientos uno contra uno (aunque se puede jugar en equipo) con un mazo de 30 cartas cada uno y con el objetivo de matar al rival quitándole su vida.
La mecánica simplificada es la de todos los juegos de cartas, cada uno en su turno dispone de unos cristales (el equivalente al maná del Magic) para utilizar las cartas de su mano. Tendremos hechizos, minions, armas y otros tipos de cartas muy variadas. Es importante no solo disponer de un mazo de cartas bien construido sino además saber utilizarlas y tener un poco de suerte en la partida.
Mi background
Yo no soy nuevo en esto de los juegos de cartas, de hecho yo comencé a jugar al Magic cuando la cosa no había sino comenzado, y estuve bastantes años gastando invirtiendo dinero en cartas e incluso disputando algunos de los famosos Opens de Madrid (llegando un año incluso a estar cerca de la victoria en uno de ellos, pero esa es otra historia…). Ese fue el pico pero fue hace tantos años que no se si cuenta. Aunque si creo que me ha ayudado a arrancar.
El caso es que desde entonces, el Magic lo abandoné (conservo mis cartas pero en un archivador para disfrutarlas y poco más), y me he limitado a juegos de cartas puntuales y alguna partida que otra muy esporádica. Eso si, el gusanillo sigue intacto y por eso mi interés en el HearthStone.
Es curioso que cuando apareció el HeartStone en 2014 yo me lo instalé y ha estado instalado en mi ordenador desde entonces (si, incluso cuando me cambiaba de ordenador) pero nunca me decidí a probarlo, más por miedo a que me gustará y me enganchara demasiado para el tiempo disponible en ese momento.
Mis primeros pasos
Lo primero es instalar BattleNet y tener una cuenta. Esto para mi ya estaba hecho y como he dicho el juego estaba instalado, así que fue simplemente darle a jugar y estaba dentro. Lo primero que el juego hace es «obligarte» a jugar 5 partidas introductorias en las que te va contando como funciona la mecánica del juego. Si tienes un background de Magic como yo, o si eres espabilado, no te costará mucho pasar esas 5 partidas. Para mi debo decir que fueron fáciles pero ayudan a saber de qué va el tema.
En Hearthstone no hay colores, sino que hay héroes. Cada héroe tiene unas cartas específicas propias y luego hay unas comunes para todos. Para poder jugar contra otro humano primero tienes que vencer una partida a cada uno de los heroes del juego en el modo práctica. Las partidas tampoco son nada complicadas pero también ayuda a ver los diferentes héroes y formas de plantear el juego.
Una vez completadas esas 5+9 partidas, pensaremos que estamos listos para jugar contra otro humano, pero nada más lejos de la realidad. Los héroes tienen niveles, y en el nivel 1 solo disponemos de las 10 cartas básicas del juego para usar en nuestro mazo. Esto significa que para poder usar todas las cartas básicas tenemos que subir todos los héroes a nivel 10. Y esto no se hace en 5 minutos.
Lo bueno es que se puede hacer jugando en el modo «Play» (muy original) que nos busca un enfrentamiento online contra otro jugador humano, siendo las partidas más interesantes.
Mientras vamos haciendo esto vamos ganando Oro realizando «quests» o aventuras que nos propone el juego. El oro se puede gastar en comprar nuevos sobres de cartas, cada uno con 5 cartas para ampliar nuestra colección. También se puede usar dinero real para comprar los sobres, pero mi intención no es gastar ni un euro en el juego por el momento así que tendré que seguir el ritmo lento de evolución.
Una vez vamos ampliando la colección, podremos crear nuevos mazos para jugar, personalizarlos y mejorarlos. También hay una cosa que se llama crafting y que parece servir para deshacerte de cartas repetidas y conseguir otras a la carta, pero esto no lo he probado todavía.
Primera impresión
La primera impresión es bastante buena. Por un lado al haber pasado tanto tiempo desde que jugaba al Magic no estoy comparando las mecánicas todo el rato, me limito a disfrutar de este juego. las partidas por ahora no son muy excitantes pero claro, el hecho de no haber creado mis propios mazos le quita un poco la gracia al asunto, pero veo mucho potencial en el juego y creo que lo voy a disfrutar.
Por el momento sigo concentrado en subir los 10 héroes a nivel 10 y a partir de ahí veremos por dónde seguimos. Estoy jugando siempre contra humanos, ya que la máquina no me ofrece diversión y por ahora lo voy disfrutando y no voy mal del todo. No tengo capturas propias porque este post no estaba programado, pero en las próximas partidas intentaré hacerlas pensando en vosotros.
La próxima actualización os contaré un poco más sobre el interfaz de juego y lo que me gusta y no me gusta de él, y os contaré mis avances, por supuesto.
Si hay algo que queráis saber, dejad un comentario y encantado lo responderé. ¡Deseadme suerte en esta nueva aventura!