Cuando le dices a la gente que tienes un blog, hay respuestas de todo tipo, pero la mayoría de la gente pregunta lo mismo, y ¿qué ganas con ello?
Y la verdad es que es una muy buena pregunta. Se dice por ahí que el 80% (ojo, número inventado 100%) de los blogs existentes no tienen ningún tipo de beneficio ni ingresos de ningún tipo. Y si lo pensamos, mirando los blogs que visitamos día a día (y los que no visitamos que son algunos más ;)) es cierto que la mayoría no tienen anuncios ni venden ningún producto.
Pero hay una parte que olvidamos siempre, yo el primero, y es que el dinero no es lo más importante. Mañana se me olvidará, pero lo dejaré escrito aquí para recordarmelo cuando tenga dudas, el dinero no es lo más importante del blog, ni puede serlo nunca.
En esta vida, por desgracia, el dinero es necesario, para comer y para muchas otras cosas, pero una vez cubiertas las necesidades básicas, no hace falta dinero para nada. Ni para pasartelo bien con los amigos ni para comprar regalos en navidad. Hace ya un año que se escribió este artículo sobre los cinco mejores juguetes de la historia y lo ha actualizado este año con un sexto juguete tan bueno como los anteriores (lectura obligada para hoy), está en inglés, pero ¿queréis saber cuales son? Yo os pongo la lista, un palo, una caja, una cuerda, un tubo de cartón, la suciedad, y el sexto pero que podría ir el primero, el agua. Da qué pensar, ¿verdad?
Y parece mentira que yo mismo he escrito en este mismo blog una entrada que dedicada justamente a eso, «Gratis no puede ser» se llama, es curioso que ahora este escribiendo otro artículo totalmente opuesto (bueno, no es totalmente opuesto). Pero tiene sentido (de verdad, dejadme que me explique), se puede hacer un blog que dé dinero, y de hecho, si queremos vivir de ello, tiene que dar algo de dinero, y no hay que avergonzarse de ello. Pero el dinero no puede ser la motivación. Ni de un blog ni de nada que hagamos en la vida. Cuando el dinero es lo que nos mueve y nos motiva, llegará un momento en el que nos pararemos, o bien porque el dinero no nos deja ver el resto de cosas que tenemos alrededor o porque tendremos tanto dinero que ya no nos motive. En cualquier caso, como gasolina para un proyecto, el dinero no funciona.
Pues bien, olvidemos el dinero por unos minutos, al menos lo que tardamos en leer este artículo, y voy a responder a todas esas personas que durante años han preguntado qué ganaba con el blog.
Está claro que lo primero que se me viene a la cabeza es la experiencia que he adquirido, tanto en montar una web como esta como en mantenerla durante estos años, con días buenos, noches enteras arreglando un hackeo de un desgraciado, pasando horas mirando las estadísticas (mira que nos gusta mirar numeritos y gráficas) y no sólo temas técnicos, marketing, leyendo otros blogs y fijándome cómo escriben y aprendiendo de ellos.
Una de las motivaciones de mucha gente al escribir un blog es, aunque todo el mundo lo niegue si se lo preguntas, es subir la autoestima, el ego. En mi caso, lo niego como todos los demás, :P, pero admitiré, que aunque nunca fue lo que me impulsó a hacer el blog, si que da un gustito personal saber que cada vez hay más gente que te lee. y aprovecho el momento para dar las gracias a todos los que pasáis por aquí y me leéis (que ya tenéis merito con lo pesadito que soy a veces ;)).
Hay otros beneficios que, aunque no son exactamente dinero o tangibles, podrían entrar en esa caja también. Como ejemplo pondré el «enlace de amigo» de Dropbox. Gracias a vosotros ya tengo los 8 gigas de máximo en la cuenta de dropbox y me ha permitido moverme a la nube sin dudar.
Amigos. Si, hay mucha gente a la que he conocido por el blog, y hay gente a la que querría conocer más, pero lo que está clarísimo es que el blog me ha conectado con gente nueva, y eso hay que valorarlo.
Tener un blog y mantenerlo durante años me ha obligado a organizarme, a vencer la pereza de escribir y sentarme en la pantalla y sacar algo en claro cada semana. Porque ya os digo que en estos más de tres años que llevo con el blog, hay momentos en los que piensas en mandarlo todo a la mierda y dejar de «perder el tiempo» con esto. Ahora tengo muy claro que la perseverancia es la clave para hacer que cualquier proyecto siga adelante.
Un blog te obliga a investigar, a leer mucho, a buscar cosas nuevas que contar cada día, y sobre todo a aprender cosas nuevas cada día. Si me dicen hace años que me voy a dedicar a escribir todas las semanas sobre algo diferente cada vez, diría que están locos, que no me conocen, ¡qué a mi no me gusta escribir! Y mírame ahora, escribiendo y disfrutando con ello.
Hace unos días he leido un twitter de una persona que ni conozco, Francisco Muñoz, las cosas de internet. Iba referido a emprender y a los negocios, y me encantó, decía así:
Yo voy a cambiarla un poco y voy a decir que «A veces se gana pero siempre se aprende«, o lo que es lo mismo:
Siempre se gana.
Ahora, vamos a hacer un momento de reflexión, piensa en ese negocio o proyecto que tienes pensado montar. Piensa cual es tu motivación, elimina el dinero de la ecuación y mira si todavía te quedan ganas para seguir adelante. Si es así, adelante, y ¡buena suerte!