Inicio en el iniciador

Esta aventura del blog personal comienza después de darle muchas vueltas a la cabeza, y coincidiendo con la última charla del iniciador del mes de abril. Aproveche ese día para interrogar a tres de las personas más importantes que había por la sala, y sobre todo a tres personas que saben de sobra lo que hay que hacer, pero sobre todo, lo que no hay que hacer con un blog. Estas tres personas eran Carlos Blanco, Angel María y Albert Armengol.

Pese a que no me conocían de nada, y que supongo que pesados como yo tendrán en cada charla, tuvieron el honor de aconsejarme tuve el honor de que me aconsejaran, e incluso con Albert tuvimos una interesante «mini-charla» sobre blogs. La pregunta que les hice era muy sencilla, ¿un blog personal para el trabajo y otro para el ocio? ¿Es mejor separar o tener uno doble? La respuesta no era clara, algo que ya sabía antes de preguntarlo. Al final me quedé con un 2-1 a favor de separarlos. Con todo esto hice caso de la máxima que he oído en varias ponencias desde que empecé a tomarme en serio este mundillo, y que en diferentes variantes viene a decir: «Escucha a todo el mundo y no hagas caso a nadie».

Y bueno, no es del todo cierto, les hice caso, pero a medias… :P (de haber sido un 3-0 quizás no me hubiese atrevido)

Después de esto me he tirado unos 20 días haciendo el blog (único, como veis). Pero claro, cuando después de 15 días de tener el blog medio instalado en Drupal, decides cambiarte a Wordpress, pues los plazos se estiran. El resultado lo tienen delante.

Objetivos: Disfrutar e intentar hacer un blog al que yo me suscribiría. Si no consigo que me guste a mi, poco gustará a los demás.

PD: Editado por un error tipográfico gordo. Empezamos bien. :P