En este blog se valora tanto la productividad como el descanso, y la prueba es que hay una categoría específica dedicada única y exclusivamente al relax. El ritmo de vida que llevamos nos arrastra a hacer cuantás más cosas mejor, sin detenernos y sin descansar. Y este no puede ser el objetivo.
Cuando se explican los sistemas de gestión del tiempo, siempre hablamos de cómo no olvidar esas tareas que tenermos que hacer, consejos y múltiples formas para gestionar nuestras listas de tareas de la forma mas eficiente que nos permita hacer más cosas en menos tiempo, en definitiva cómo conseguir ser más productivos de lo que somos. Pero se nos olvida algo muy importante: cuando se trata de gestionar el tiempo, también hay que ser capaz de gestionar el tiempo libre.
Cuando hacemos ejercicio, es obligatorio dejar unos días de descanso tras los esfuerzos físicos. Estos descansos no solo permiten al cuerpo recuperarse y cargarse de energía para el siguiente día de entrenamiento, sino que permiten al músculo expandirse y aumentar de tamaño, mejorando nuestra capacidad para afrontar los siguientes esfuerzos. Del mismo modo que los músculos, nuestra mente funciona de un modo parecido. Tras muchos esfuerzos y horas de trabajo, la mente se detiene y necesita descansar. Además el descanso nos permite abordar los problemas que parecían imposibles el día anterior con ideas frescas y una mayor motivación.
by mermaid99
Nuestra productividad cuando estamos cansados desciende de forma exponencial, y es muy probable que cometamos errores en lo que hacemos, teniendo que repetir el trabajo al día siguiente. Llega un momento que la cabeza dice basta, y aguantar más horas sólo porque «toca» o porque nuestra lista de tareas dice que hay que seguir no va a mejorar la situación. Es mejor retirarse y regresar al día siguiente. ¿Quién no ha tenido la experiencia de estar hasta tarde intentando resolver un problema, y que a la mañana siguiente se resuelve casi solo de la forma más sencilla? En ese momento nos preguntamos como es posible que no viéramos la solución el día anterior, y en el fondo todos sabemos la respuesta.
Cuando nos disponemos a implementar un nuevo hábito en nuestra vida, muchas veces apretamos el calendario para encajar esa nueva actividad que vamos a desarrollar y me atrevería a decir que en la gran mayoría de los casos, el tiempo se saca de nuestro ocio. Nos cuesta mucho reconocer que un hábito pueda salir del tiempo que dedicamos a otras tareas «productivas». Si analizáramos nuestro horario de cada día, encontraríamos huecos claramente poco productivos que podríamos usar para implementar esos hábitos, dejando nuestro ocio y descanso sin modificar. Probadlo y os sorprenderéis de lo que mejora vuestra productividad bajando las horas que dedicáis a producir y aumentando el tiempo de relajación y descanso.
Desde hace años siempre he tenido claro que la mente y el cuerpo necesitan descansar, y he procurado, tanto en mi época de estudiante como ahora, descansar los fines de semana, por lo menos. Quizás me he acostumbrado desde hace mucho, pero no me cuesta ningún esfuerzo desconectar del trabajo una vez cruzo la puerta de la calle, hasta el punto que los lunes tengo que sacar partido de mi sistema GTD para recordar cuales eran las tareas que dejé a medias la semana pasada, y soy capaz de afrontarlas cada día con una mente despejada, descansada y preparada para encontrar soluciones a los problemas que se presenten.
El sistema GTD también tiene mucho que ver en esto. Confío tanto en mi sistema que cuando apunto las tareas, puedo sacarlas de mi cabeza sin miedo, sabiendo que volverán a mi cuando sea el momento de hacerlas. Desde que implemente el sistema, la desconexión al terminar la jornada es total, y el descanso y relax se nota en mi productividad al día siguiente.
by jypsygen
Tan importante es ser productivo cuando hay que serlo como ser capaz de desconectar y descansar cuerpo y mente cuando no se está trabajando. En nuestra lista de tareas tendríamos que apuntar una tarea especial hoy y todos los días: el descanso.
Cómo tarea para hoy os voy a pedir que analicéis vuestro calendario semanal, y reviséis si en vuestra agenda, tenéis el suficiente tiempo dedicado a vosotros, tiempo libre sin programar, sin nada específico que hacer y que queda libre para aquello que os apetezca en ese momento, y si no existe ese espacio, hay que crearlo.
Si para algo tiene que servir ser más productivos es para conseguir más tiempo libre que nos permita disfrutar más de la vida y ser más felices (¿ese es «El Plan» no?). No se trata de producir más en el mismo tiempo, sino de dedicar menos tiempo para producir lo mismo. Y ese tiempo que ganéis, es para disfrutarlo vosotros solos o para compartirlo con vuestros amigos, familia, etc.
Y tú: ¿Dedicas suficiente tiempo a descansar durante la semana? ¿Tienes problemas para desconectar del trabajo?